Coco Chanel en una de sus citas más célebres dijo algo que yo, mujer de extravagancias, aplico cada vez más a mi vida: menos es más. Si nos detenemos un instante a reflexionar sobre estas palabras no tardaremos mucho en darnos cuenta de que es cierto. Los mejores perfumes vienen en frascos pequeños, al igual que los venenos más peligrosos. Con ese alegato regresé a mi casa anoche, tras ver La Pilarcita, una obra dirigida por Chema Tena en el Teatro Lara.

La Pilarcita no es un espectáculo que se pueda comparar con los musicales de Gran Vía, pero siendo sincera me ha supuesto una grata sorpresa. Es sorprendente poder apreciar cómo con un espacio tan pequeño, con un argumento tan cotidiano y con un elenco tan reducido se produce tanta magia. La definición de calidad reside en eso mismo.

«Es sorprendente poder apreciar cómo con un espacio tan pequeño, con un argumento tan cotidiano y con un elenco tan reducido se produce tanta magia»

Las personas que venimos de un pueblo nos resulta demasiado fácil sentirnos identificados con el personaje de Lucía, interpretado por la actriz Carla Díaz, una chica que quiere ampliar sus horizontes y sueña con vivir en la ciudad. La trama se desarrolla en el patio de un precario hotel de un pueblo extremeño, el cual dirige la hija de los dueños, Luisa (Júlia Molins). El único atractivo turístico lo encarna la Virgen del Pilar, La Pilarcita, pues es famosa por cumplir milagros a cambio de una muñeca como ofrenda. Álex de Lucas como Joaquín, a modo trovadoresco, contaba qué estaba sucediendo con la ayuda de rimas disparatadas y que, al mismo tiempo, estaban muy bien pensadas.

Sin duda alguna, y a pesar de las maravillosas actuaciones de los cuatro actores, debo destacar al personaje de Selva, interpretado por Mona Martínez. Sus salidas de tono, sus muecas, sus gestos; resulta imposible no conectar con ella. Es sencillo estallar a carcajadas e incluso llegas a emocionarte cuando ella lo hace. ¿La razón? La tremenda dosis de realidad y de verdad que hay en todo aquello que hace o dice. Simplemente impresionante.

La Pilarcita es el claro reflejo de menos es más. Una representación encantadora y cien por cien recomendable. Os invitamos a todos a que os paséis a disfrutadla cada sábado a las 19:15h y cada domingo a las 20:15h en el Teatro Lara.