Ayer, 21 de enero de 2036, se cumplieron cinco años exactos desde que la opinión pública del Estado Federado España (EFE) comenzara a virar en una dirección que fue entonces apenas perceptible: el nuevo partido Sí, nosotras hacía su presentación ante mil mujeres-hombres en el Pabellón Recreativo de la Gente de la ciudad de Soria, uno de los numerosos polos tecnológicos de la arrolladora industria de componentes para la automoción aérea diseminados por la región Meseta-Este del EFE. La formación lanzaba aquel mismo día la sorprendente propuesta que ha monopolizado en tiempo récord las agendas mediática y política no solo de ese estado federado, sino de toda la Federación de Iberia. Que se ha convertido, además, en motivo de grave preocupación para la Europa de los 14.

Media década después, y pese a haber sido siempre dibujado como un irrelevante y grotesco outsider por las tertulias y la política oficial, Sí, nosotras es la formación del momento del land español: los veinte sondeos ya publicados de la serie mensual certifican que obtendrá casi la mayoría absoluta, 120-122 escaños sobre los 250 de la Asamblea de EFE. Tampoco hay dudas de que la segunda fuerza, la derecha hoy en el Gobierno Federado Español que representa Tu voz -el más veterano partido, nacido en el arranque de la Década Caótica (2017-2027)-, aportará sus 60 diputados previstos en las elecciones recién convocadas para marzo, en un Gobierno de coalición con Sí, nosotras. Tu voz, después de cinco meses en el poder, no se recupera del escándalo que ha supuesto la revelación del presunto delito de tentativa de seducción con el que se acusó hace dos semanas al actual Presidente de EFE Antonio García. La inmediata Votación Telemática Popular dictaminó que los hechos, acontecidos en la etapa universitaria del dirigente, fueron ciertos, y la caída en su Índice de Popularidad Compuesto Para Todas las Redes (IPCPTR) ha resultado en la retirada inmediata del apoyo parlamentario por parte de sus socios del Partido para la Tercera Regeneración Democrática, quienes a su vez recogen réditos por su acción en forma de un incremento en la intención de voto del 13%.

En cualquier caso, parece cierto que, tras el adelanto de elecciones en EFE por la pérdida de apoyos del actual Gobierno, el nuevo Ejecutivo de coalición liderado por Sí, nosotras llevará a cabo la reivindicación única de su programa electoral: Tu voz ha dejado caer su disposición a aceptarla, a cambio del 50% de Cargos de Designación Discrecional que quedarán vacantes. Esa reivindicación no es otra que su propuesta de aquella tarde invernal en Soria: la celebración de un Referéndum de Autodeterminación en EFE –el ya popular raefe-. La consulta, que se pretende vinculante, se produciría antes de final de año en el territorio de ese Estado, tal como quedó configurado tras la nueva Constitución Federal que cerró –hoy ya parece que en falso- la Década Caótica. Por lo tanto, un plebiscito en que las mujeres-hombres de EFE decidirán libremente si continúan vinculados al Estado Federado Catalunya (EFC), o deshacen la joven III República Federal Ibérica. El atractivo de Sí, nosotras en su estratégica labor en redes; el carisma de su lideresa y próxima presidenta Lidia Guerrero -empresaria de éxito en la industria de recomposición facial, oro en tiro al arco desde caballo al galope en los pasados Juegos Federales-; sus videos semanales –siempre de una retórica envolvente, mirada fija al objetivo, eslogan No necesitas a los parásitos como cierre invariable- han sido capaces de convencer de la legitimidad de la reivindicación a gran parte de las mujeres-hombres del EFE. Otras frases como Ahora decidimos nosotras o Sin catalanes, el segundo despegue han sido exhibidas en los últimos dos años no sólo en balcones de seguidores, sino también en fachadas de los primeros municipios gobernados por Sí, nosotras. Guerrero da por hecho que un 50% + 1 de síes “bastan y sobran” para disolver la República.

Las reacción catalana no se ha hecho esperar. El Govern Federat  Català (GFC) ha protestado, aduciendo la ilegitimidad de una votación que pretende excluir a las mujeres-hombres del EFC de una decisión de tamaña trascendencia, y que revoca, sostiene, sus derechos de ciudadanía. El president catalán Oriol Puiggalí recordó ayer tarde, tras inaugurar en Vic (Vegueria Osona) una planta de empaquetado de calçots –un tipo de cebolla originario de EFC-, las bondades del pacto de convivencia tan trabajosamente alcanzado entre las naciones catalana y española, tras una larga década de conflicto y disturbios. Un equilibrio que, según reiteró, el pueblo catalán nunca permitirá que se destruya mediante una votación exclusiva en el EFE que no tiene base jurídica. Puiggalí calificó, además, de totalmente infladas las cifras del déficit de la balanza catalana con la Federación, que son recordadas de forma sistemática por Sí, nosotras en su campaña por el referéndum. Asimismo, expresó su esperanza de que el EFC recupere progresivamente parte de su pasado esplendor turístico, tan mermado hoy tras la espectacular eclosión los últimos años de destinos mediterráneos como Albania o Bosnia, o la pujanza irrefrenable que disfruta China tras la construcción en su litoral de réplicas low cost de los principales destinos mundiales de vacaciones, entre ellos -y de los más exitosos-, la Nueva Barcelona.

El Presidente Federal -cargo rotatorio que desde el 1 de enero y durante este año recae en el representante del Estado Federado País Vasco/Euskadi (EFPVE)-, Koldo Etxebarría, ha pedido prudencia y diálogo a las partes, y ha expresado la necesidad de un debate sosegado sobre la cuestión en el Senado Federal. El Primer Ministro Federal, Pedro de Azpilicueta, de Izquierda por la Emotividad, por ahora guarda silencio. Los presidentes de los otros dos estados federados de la Federación, el citado EFPVE y el Estado Federado Galiza (EFG), no parecen tener una postura clara sobre si las mujeres-hombres de EFE deberían poder votar en exclusiva una hipotética secesión, dado que este supuesto no se contempló en la solución constitucional de 2027. Tampoco se pronuncian sobre con quién continuarían formando la federación, si con catalanes o con españoles, si se diera el caso. Algunos juristas de prestigio han declarado en los últimos meses que, a causa de la precipitación con que se redactó la nueva Carta Magna, no está claro si Iberia es una federación o una confederación, y por tanto, si la soberanía reside en el todo o en las partes. Incluso se cuestionan que exista ya algún tipo de soberanía para Iberia o para cualquiera de sus territorios. Por último, Juan Peris-Ros, portavoz en la Asamblea Federal por el Partido por la Centralidad, la fuerza heredera de las viejas formaciones conocidas en su día como constitucionalistas, y disueltas durante el transcurso de la Década Caótica, se ha manifestado radicalmente en contra de la pretensión de Sí, nosotras: con esa votación no se pretende otra cosa, sostuvo Ros ante los medios, que una expulsión encubierta de los catalanes de nuestra Federación. El Partido por la Centralidad podría no renovar su escasa representación parlamentaria en los próximos comicios federales de junio, según apuntan diferentes encuestas.