La sociedad tiene una extraña tendencia a abandonar la lectura. Estímulos externos, dicen. Los niños leen, eso nadie lo duda, pero al llegar a la adolescencia empiezan perder ese hábito. Si echo mi vista lectora atrás yo era una niña que leía mucho. Libros, sí, pero también cómic y tebeos. Muchos tebeos. Mi generación se crió entre zipizapes y mortadelos. Y crecimos leyendo volúmenes finitos o no tanto. Y pasamos al siguiente escalón. Del tebeo infantil al de adulto. Del barco de vapor al libro. Y ahí quedó un poso que alguno de nosotros ha perdido, pero otros no.

Generemos el poso para evitar perder lectores.

Llega a mi manos un volumen DC editado en España por Editorial Hidra, dentro de su colección joven adulto. Teen Titans Raven de la autora del New York Times que se sube a todo los podios, Kami García.

Tengo que aclarar que para mí el volumen está enfocado a los jóvenes, pese a que yo, adulta,  lo he disfrutado muchísimo. (Lo he puto amado, que dirían ellos)

Raven adapta este personaje mítico de DC a un nuevo enfoque: en día a día de una chica adolescente en su instituto. Más humana menos superhéroe. Pero Raven es Raven y pese a que la obra se centra en su vida cotidiana no deja, ni mucho menos, de aparecer esa Raven superhéroe con unos poderes que apenas entiende. ¿Cómo consigue esto la autora de un personaje ya archiconocido?

Un accidente trágico hace que nuestra heroína pierda la memoria y se traslade a vivir con su tía y su prima Max, que desprenden potencial comiquero por todos sus poros.

La tragedia de la pérdida, el empezar de cero, la soledad, el amor juvenil… y la lucha de titanes. Todo tiene cabida en un cómic que, como reza su portada, «una vez que empieces a leer, ya no podrás parar». Hacedme caso, me ha pasado.

Encargado del dibujo Gabriel Picolo, con una línea cercana al gusto adolescente del manga, quien con trazo sencillo pero no exento de expresión, acompaña perfectamente el guión. Gabriel destaca en la escena lo verdaderamente importante. Lo mismo ocurre con el color, a cargo de David Calderón: predominan grises y negros, pero la página torna en color cuando la trama lo requiere. Rojos, azules y algún verde iluminando actos y sensaciones.

He disfrutado tanto leyendo Raven que volví a mi infancia de Tío Gilito y he retomado la sana costumbre de leer cómics. ¿Por qué no? 

Pero quizá tú eres lector y ya amas los libros por encima de tus posibilidades económicas. (A los grandes lectores nos suele pasar, lo compraríamos todo).

Estas de suerte, lector, también tengo una recomendación muy especial para ti. «La curiosa librería» una preciosa obra publicada por la editorial Pastel de Luna, del ilustrador japonés Shinsuke Yoshitak, quien nos narra por medio de un dibujo estilo cartoon de línea clara y colores planos, historias cotidianas, muy sencillas pero repletas de magia.

No esperes encontrar en este cómic otro hilo conductor que el inconmensurable amor a los libros de los buenos lectores. No lo hay. Compuesto de breves relatos, las ilustraciones narran escenas que suceden en el interior de una librería que tiene todos los libros que los clientes buscan. Así descubrimos «libros para dos o más lectores, libros hechizados del mundo o libros que hablan de libros. Y no solo eso. Este hechizado viaje nos llevará a conocer cómo se celebra una boda entre amantes de los libros y ¡hasta a la receta para cocinar uno!

Maravillosa lectura. Sin duda. Una de esas lecturas que dejas posada al lado de la cama y de vez en cuando abres por una página aleatoria solo para reafirmarte en tu amor por la lectura.

Si conoces un lector y necesitas un regalo perfecto, no lo dudes. Este es tu volumen. Solo tendrás que añadir el papel de regalo y una enorme sonrisa al entregarlo.