Miguel Gane (George Mihaita Gane), nació el 20 de julio de 1993 en Leresti, Rumanía. Es autor de los poemarios Con tal de verte volar (AGUILAR), Ahora que ya bailas (AGUILAR), La piel en los labios (AGUILAR) y de la novela Cuando seas mayor (SUMA). En Ojos de sol, Miguel Gane, el autor de Ahora que ya bailas y La piel en los labios, hace un homenaje al amor y a la singularidad de cada persona que se cruza en nuestras vidas. Es un poemario en el que, de alguna forma, te vas a encontrar. Las margaritas son las flores más comunes de la naturaleza y su belleza reside en su aparente sencillez. Simbolizan la pureza, la luz, la inocencia, la honestidad y la libertad. Pero, aunque puedan parecer iguales, cada una es singular.

 

¿Cómo vive un poeta en el siglo XXI?

Pues cansado absolutamente. Sobre la figura del poeta, siempre ha habido una especie de imagen que la gente se ha hecho. Se nos relaciona mucho con la. bohemia, con la vida de escasez, de la observación o filosofía. Un poeta va más allá, a mi me gusta el fútbol, hago dieta, tengo amigos con los que no hablo de libros. No estoy metido todo el día en la vida bohemia, me gusta ir a la playa y tomar el sol. Un poco normalizar, eso que no encajaba en la vida del poeta, es una vida común pero que está en constante observación para recoger todos los estímulos de la sociedad, lo que te ofrece para poder trabajar.

¿De qué equipo es?

Bueno, soy del Leganés pero simpatizo con el Real Madrid en Champions. Mi equipo del alma es el Rapid de Bucarest. Está en Rumanía, es mi equipo del alma y me veo todos sus partidos desde que estaban en quinta división.

La gente suele decir que sus poemas llegan al corazón, ¿qué le llega a usted al corazón?

Bueno, naturalmente todo el movimiento que hay a mi alrededor. Todo el movimiento que me ayuda a transformas lo que llevo dentro, a canalizar. Todo lo que me hace click es lo que me toca, lo que me da el primer verso. Todo viene de las personas, ya sea de manera directa e indirecta. Uno lee el periódico, sale a la calle, habla con gente… entonces, todas las cosas que me hacen escribir son las que me tocan.

¿Una locura que haya hecho hace poco?

27 horas de avión desde Buenos Aires, Bogotá y Madrid. Aeropuertos, escalas y controles de seguridad. Esa es la locura que hice hace poco y no quiero más.

«Cada vez siento más presión cuando saco un nuevo trabajo. Cuando uno lleva seis años publicando naturalmente la gente tiene expectativas, esperan cosas de ti»

Cuando saca un nuevo trabajo, ¿siente presión?

Cada vez más. Cuando uno lleva seis años publicando, naturalmente la gente tiene expectativas, esperan cosas de ti. El camino de la literatura, cuando se suele avanzar en el tiempo se imprimen más libros, las editoriales están más encima porque tienen que cubrir más ventas. Se juntan un cúmulo de cosas que a veces te pisa un poco. Hay que aprender a canalizar eso, ahí está la clave de todo eso. Yo he conseguido canalizar esa presión. Con el rato de escritura no lo siento tanto, pero ahora que acabo de publicar sí que siento esa presión.

¿Han llegado a obsesionarle algunos de sus trabajos?

Obsesionarme no, me he metido muy dentro de ellos porque quiero crecer dentro de esto. Naturalmente llevo seis años e intento que mil libros sean pasos adelante, intento no estancarme. Entonces, es cierto que cuando te metes dentro de “Ojos de sol”, estaba pendiente de eso, porque lo de alrededor no lo tengo en cuenta. Te intentas evadir de todo, soy muy gruñón además y en ese momento mucho más.

¿Qué le impulsó a escribir este libro?

Básicamente conversaciones con amigos. El libro trata un tema generacional, a la que yo pertenezco tengo 28 años y nos enfrentamos a las mismas situaciones. A trabajos precarios, temas de salud mental… un poco, lo que se espera de nosotros, somos la generación de cristal, la generación frágil. Todo nace de conversaciones que he tenido con amigos. He buscado puntos en común con ellos, explicaciones. Tiene una parte personal de lo que me ha tocado vivir a mi a lo largo de mi vida.

¿Por qué esa dedicatoria a su abuelo?

Bueno, de alguna manera mi abuelo fue un hombre muy de la tierra, del pueblo. A penas sabía leer, por hacer un poco de justicia poética, el falleció antes de que yo publicara este libro. Yo odio mucho romantizar la muerte de un ser querido, se dice que fue bueno. Mi abuelo fue una persona normal, no hizo grandes actos heroicos. De una manera quería dejar constancia de que las personas humanas son las que mueven mundo.

«Mi abuelo fue una persona normal, no hizo grandes actos heroicos. De una manera quería dejar constancia de que las personas humanas son las que mueven mundo.»

¿Por qué esta estructura?

Sí, “Ojos de sol” está estructurado como una margarita. De hecho, así se le llamaba antiguamente a la margarita. Utilicé estos poemas porque lo que busco con el libro es que sea un poco espejo de mucha gente. Esta vez lo he hecho a posta, la parte de la raíz son los que tienen que ver con la tierra, todos nos vamos de nuestro pueblo, avanzamos en edad… entonces, naturalmente cada parte tiene una esencia construida. La parte del tallo habla del exterior y es mucho más profunda.

¿Qué tres palabras definen este libro?

Yo diría que luz, amarillo y espejo.

¿Se queda con España o Rumanía?

En Eurovisión iba con España, pero me gustaba Rumanía también. Cuando juegan las dos pues no sé, el que gane. Depende del momento, naturalmente me quedo con mi pueblo y Madrid, porque es la ciudad que me ha acogido. Como país, España es un mundo absolutamente diferente. Rumanía es una tierra complicada, hay muchos conflictos de los que no se habla y no se resuelven. Hay mucha violencia verbal, que asola mucho al país. A mi eso no me hace estar muy cómodo, porque cuando voy sé que tendré conflicto. Siempre hay alguien, por ese lado me estresa mucho. Si me voy en la montaña, que es mi pueblo, no tengo problemas porque me evado de todo el mundo.

¿Qué tal se maneja en las redes sociales?

Pues son muchos años, podría decir que bien. Ahora están en un punto en el que no sé qué carajos pasa. Los algoritmos o el funcionamiento van cambiado mucho. Salen nuevas redes y hay que aprender a adaptarse a ellas. Llevaré diez o doce años en redes sociales compartiendo poesías.

¿Es “Ojos de sol” su favorito?

Bueno, naturalmente. Cuando publicas el último es tu favorito porque tienes que vender. Cada uno es especial, están escritos en un momento puntual en mi vida. Pero en este, he escrito los mejores poemas que yo tengo.

¿Están basados en sus vivencias o en agentes externos?

En este caso, he hecho una dualidad. Hay otros en los que están basados en tercera persona. Sobre todo en la parte de raíz, me he permitido escribir muchos poemas en primera persona.

¿Está su sexto libro en proceso?

El sexto, séptimo, octavo y noveno. Estoy con la gira ahora, necesito mucha estabilidad para escribir, encontrar un lugar. Ahora estoy con movimiento y no me da tiempo. Tengo en la cabeza muchas ideas y estoy desarrollando muchas estructuras. En julio abriré un grifo, en el que saldrá todo. Tengo ganas de que “Ojos de sol” llegue a todo el mundo posible. Me apetece mucho meterme en una nueva historia.