Cuando dios entregó la palabra al hombre distinguiéndole así del resto de los seres vivos, supo que bien podíamos convertirla en un arma arrojadiza o en el  motor creativo más bello del Universo. Entre estos últimos figuran aquellos que por fortuna o elección dedican todas sus horas a ejercitar el noble arte de la escritura, punto donde me gustaría presentaros a José Manuel Aparicio.

Los libros, sean los que él escribe, por cierto  obras que gozan de una crítica magnífica, o bien durante su tarea profesional como consultor editorial en la  agencia de  Servicios Editoriales Rúbric, no solo le rodean sino que sirven de aprendizaje para quienes disfrutamos de la novela histórica.

Este bilbaíno afincado en Portugalete, nos lleva hasta el siglo I a.C. en la novela Bellum Catabricum (2020. Premio III Certamen Narrativa Histórica Edhasa) y el Medievo en la reciente Banderizos (2021. Ganadora del IV Certamen Internacional de Novela Histórica Ciudad de Úbeda). Y lo hace con  la eficacia  de quien se desliza entre la Historia y la palabra, domina la épica, el drama y la emoción consiguiendo así obras,  no solo muy entretenidas y adictivas, sino de gran talla cultural.

Me he colado en sus redes sociales, he mantenido una larga conversación más que agradable con él y le he pedido que  nos hable sobre el hombre  que dirige al escritor.

 

  • Tus referentes literarios son, entre otros, autores como Robert Graves, Roald Dahl, Juan Eslava Galán, Benito Pérez Galdós, Arturo Pérez-Reverte, Miguel Delibes o Juan Antonio de Zunzunegui. 

¿Cómo han influido cada uno de ellos en tus novelas?

Por diversas cuestiones, como el estilo. El estilo lo define casi todo. Una buena historia con un estilo flojo, fracasa. Frases demasiado sencillas, poca variedad léxica, carencia de figuras literarias… En definitiva, si eso falla, el texto resulta poco estimulante, al menos para mí. La longitud de las oraciones, la elección de las palabras, la sonoridad… son claves. Y estos autores emplean la técnica narrativa con oficio. También está la profundidad de los personajes o la capacidad para desarrollar tensión dramática a partir de un hecho anecdótico, como en el caso, por ejemplo, de Dahl. Todo un maestro.

  • De tus novelas destacaría la tensión narrativa que eres capaz de crear.

¿Con quién  disfrutas más para llevar al límite, con el personaje o con el lector?

Buena pregunta. Con ambos. Si llevas al límite al personaje y sabes trabajar con el concepto de identificación entre lector y personaje, también llevarás a aquel al límite. Lector y personaje son individuos que han de ir de la mano.

 

  • Has escrito; “Palabra a palabra, ladrillo a ladrillo se erige un edificio narrativo sólido e impactante como un palacio”. (Una metáfora muy bella por cierto.) Al parecer lo hiciste en referencia al placer sentido tras conseguir una buena frase que además te anima a seguir escribiendo.

¿Nos das alguna más de la que te sientas orgulloso  particularmente y de paso, alguna de otro autor?

Muchas gracias. Voy a quedar mal; ahora mismo (y he pensado en ello un tiempo) no se me ocurre ninguna otra. Supongo que las hay, pero imagino que tengo poca memoria para esto.

 

  • Al parecer te encanta perderte en museos con tu mujer, tomar un buen vino y escuchar más que hablar.

¿Qué piensas cuando saboreas ese vino junto a ella tras visitar un castillo que aparecerá en  tu próxima novela?

Vértigo. El vértigo de trascender el tiempo. La impresión de conectar con personas, reales o imaginarias, que nos precedieron hace siglos. Que enfermaron y se curaron, que rieron y que lloraron… Igual que nosotros. Es embriagador. Una verdadera experiencia personal que concluye con la transferencia de esas emociones al lector a través de la novela.

 

  • En tus redes sociales haces varios comentarios sobre la novela 1984 –George Orwell- indicando el impacto que te produjo

¿Quieres hablarnos  de esto?

1984 pasará a formar parte de ese grupo de novelas que me ha marcado. A través de los personajes de Winston y Julia, George Orwell nos muestra un futuro distópico que se parece peligrosamente al que habitamos. Aparatos cotidianos que te escuchan y te ven, la masa social alienada ladrando el discurso dominante, la manipulación de los hechos históricos para legitimar las doctrinas de los partidos… Orwell se anticipa casi cien años al abismal océano tecnológico e ideológico en el que nos bañamos a diario. Además, dibuja con gran humanidad a los personajes. Winston, especialmente, está hecho de carne y hueso, y de pensamiento. Orwell indaga en lo profundo de su mente con naturalidad. Me he sentido identificado tanto con lo que piensa e imagina Winston como con la forma de mostrarlo. Es una obra intelectual para leer con calma. Un texto que ayuda a poner los puntos sobre las íes de este mundo privado de privacidad al que nos dirigimos cuesta abajo y sin frenos.

  • Una novela puede surgir del sitio más insospechado, un chispazo, una noticia, búsqueda de documentación, otras lecturas…

¿De donde surgen Bellum Cantabricum y Banderizos?

Ambas nacen del deseo de emocionarme yo primero para luego emocionar al lector. Y eso lo encuentra uno en determinados escenarios que, por alguna razón, a veces azarosa, prenden la chispa de una buena historia.

En el caso de Banderizos el fuego se encendió por el deseo de contar un relato épico clásico ambientado en mi entorno, es decir, Vizcaya. Quería narrar una impactante epopeya sin necesidad de “echar mano” de grandes ciudades o territorios. El mundo bélico de estos señores de la guerra medievales, los banderizos, me proporcionaba los ingredientes ideales para conseguirlo.

En cuanto a Bellum Cantabricum, el interés por el mundo romano fue el motor. Descubrir el colosal episodio de resistencia de cántabros y astures a la dominación imperial fue el acicate definitivo, de nuevo, con la suerte de contar con los escenarios a tiro de piedra. O de scorpio, nunca mejor dicho.

 

  • En tu caso obligación y devoción trabajan juntas. Seguro que entre los lectores de tus novelas o de este artículo encuentras escritores con ganas de publicar su obra y desconocen el camino a seguir.

¿Háblanos sobre tu faceta como consultor editorial por si a alguien le apetece contactar contigo?

Me dedico a la consultoría en la agencia de servicios editoriales rubric.es. Nuestra principal misión es asesorar, guiar y acompañar a escritores independientes, instituciones y pequeñas editoriales para que puedan desarrollar sus proyectos con claridad y calidad, aumentando sus posibilidades de éxito. Trabajamos en diversos ámbitos, como es la autoedición, el diseño editorial o la corrección de textos, entre otros que vienen a cubrir las diferentes especialidades del mundo del libro. Nuestro lema es “Editamos ilusiones”. Estos son nuestros datos de contacto: 944 06 37 4   y   688 61 12 13 (asesoredicion@rubric.es)

 

Hoy hemos conocido al escritor, lo que piensa y siente, pero desearía descubrir a nuestros lectores al  hombre con quien he charlado y a quien leo con gran entusiasmo.

A simple vista, en José Manuel contrasta la imagen de una persona tímida con el toque humorístico de sus publicaciones en redes sociales, sin embargo ahondando en sus novelas y tras charlar con él, no solo te das cuenta que resulta interesante aquello que te cuenta, sino que además es una buena persona en el sentido más amplio de la palabra.

¡Muchas gracias querido compañero!!