Hoy nos acompañan dos importantes figuras en el mundo de los libros, Christophe Plantin y Begoña Valero, relacionados entre sí por una novela «La Casa del Compás de Oro» (Editorial Grijalbo).
El siglo XVI, la imprenta, las luchas entre religiones y Felipe II son el escaparate donde Christophe Plantin brilla con luz propia a través de su carta de presentación, la Biblia Políglota de Amberes. En su 500 aniversario el editor humanista y hombre culto por excelencia es el protagonista de La Casa del Compás de Oro, última novela de Begoña Valero.
Nuestra autora es una mujer formada en el ámbito de la medicina, aunque dedica gran parte de su tiempo al mundo de la literatura, la historia y la investigación. Licenciada en Medicina y Cirugía, ejerce su labor diseccionando los entresijos de la Historia hasta poder mostrar al público un exhaustivo estudio en el que destacan el rigor histórico, la claridad a la hora de escribir y al igual que sus protagonistas, el esfuerzo por trasmitir conocimiento. Todo esto ha sido reconocido por la Universidad Complutense de Madrid quien recomienda La Casa del Compás de Oro en el departamento de Historia Contemporánea, al igual que la Universidad de Valencia en el departamento de Periodismo.
En su haber dos obras: El trabajo de los libros con Gutenberg como figura central y La Casa del Compás de Oro con el gran editor humanista Christophe Plantin. Esta difusión de la historia de la imprenta a través de sus libros le ha llevado a ser nombrada Senadora del Museo de la Imprenta y Artes Gráficas de Valencia. Además Begoña contribuye a potenciar la voz de la mujer escritora con su aportación a una institución gubernamental promovida por el Ministerio de Asuntos Exteriores llamada Red de Mujeres Escritoras del Mediterráneo.
La Casa del Compás de Oro es una novela que trata sobre las dificultades que tuvo un joven aprendiz muy humilde para conseguir abrirse camino en la vida, a través de la guerra de religiones en París y Flandes. De este modo consiguió convertirse en el mejor impresor del humanismo llegando a ser nombrado por Felipe II el architipógrafo o dicho de otro modo, el impresor del monarca. Una novela que nos enseña como con esfuerzo y buen hacer se puede alcanzar la inmortalidad.
La novela comienza con la Inquisición ejerciendo su poder absoluto ante los ojos de un niño que al llegar a la edad adulta, lejos de amilanarse por la ignorancia que le rodea, se convierte en uno de los hombres más cultos de la Europa del S. XVI. ¿Crees que la mano dura adoctrinando al pueblo le abren los ojos a la realidad?
No es la mano dura lo que abre los ojos a la gente sino la educación. En el siglo XVI gracias a la difusión de los trabajos por Christophe Plantin a través de la imprenta, permite que los libros lleguen a todos los niveles de la ciudadanía. Debemos tener presente las palabras de Christophe Plantin: “para un rey debería ser más importante la educación de sus súbditos que el tesoro de sus arcas”.
«No es la mano dura lo que abre los ojos a la gente sino la educación»
Tu primera novela fue El Trabajo de los Libros y ahora La Casa de Compas de Oro. ¿Por qué ese interés por Christophe Plantin y por la imprenta?
Siempre me he interesado por el mundo de la investigación, de los inventos y por las personas con gran repercusión en la humanidad… y creo que entre ellos destaca la imprenta. Esta es la vía para llevar la cultura al pueblo, porque hasta ese momento estaba en poder de la Iglesia y de los reyes que se podían permitir adquirir esos libros trascritos por monjes. De ese interés nace mi pasión por escribir sobre Gutenberg, quien representa el nacimiento de la imprenta. Más tarde retomando el tema e intentando no repetirme, me hablan sobre Christophe Plantin. Cuando investigo su vida y sus dificultades, descubro que es un impresor totalmente diferente y con una vida apasionante. Un hombre, además que proporciona trabajo a 150 artesanos en su labor de elaboración y distribución de libros por toda Europa.
Una época convulsa, dramática y difícil para los libros. ¿Cómo crees que afecta esta situación al tesón de Christophe Plantin?
Christophe, de origen humilde da especial importancia a la necesidad o al reto de superarse día a día. Estas dificultades son el revulsivo para seguir adelante superándolas con tesón, de ahí el emblema de su imprenta “Trabajo y Constancia”. Son dos palabras que, además de otras como la honradez, definen su personalidad.
¿Después de la inmensa labor de documentación realizada para escribir este libro, su publicación y excelente aceptación por parte de los lectores, llega un premio con un significado especial. ¿Qué se siente cuando ves tu libro en el Museo de la Imprenta, situado bajo el nombre de su protagonista?
Con motivo del 500 aniversario del nacimiento de nuestro protagonista, París y Amberes le rinden homenaje con diversos actos. Por ello y del mismo modo, desde el Museo de la Imprenta pensaron que sería muy adecuado colocar un ejemplar de La Casa del Compás de Oro, de manera permanente, bajo la referencia de su imagen en dicho museo. Además a su lado situaron un libro impreso en 1752 donado por otro senador. Todo esto me provoca una emoción y un sentimiento muy profundo, haciéndome sentir muy orgullosa por el regalo que me hacen.
«Cuando ves tu novela recomendada como lectura del verano en la página oficial de Kent Follet, te produce una emoción y un impacto…»
Kent Follet ha recomendado tu libro. ¿Consigue la doctora que hay dentro de ti controlar la taquicardia que esto provoca?
Cuando ves tu novela recomendada como lectura del verano en la página oficial de Kent Follet, te produce una emoción y un impacto, entre otras cosas porque no lo esperas, muy difícil de controlar. .
¿Luis de Osuna o Christophe Plantin?
Christophe Plantin como personaje real y Luis de Osuna como personaje ficción. En la novela Luis de Osuna es un hombre con un atractivo muy especial, que nos narra la historia en primera persona, lo que no nos permite conocer a Christophe nada más que bajo su perspectiva. Un recurso que utilizo para presentar al personaje real de manera totalmente fidedigna y con cierta perspectiva. En mi labor de investigación he trabajado la personalidad del impresor a través de la extensa documentación epistolar descubriendo así sus sentimientos y la manera de tratar a familiares y amigos.
¿Habrás segunda parte? Y sí es así ¿Te da vértigo enfrentarte de nuevo a Christophe después de todo lo que él te ha dado?’
Sí, habrá segunda parte. Mi idea es descubrir la historia de Luis de Osuna en base a la seducción que este ejerce sobre los lectores. No es precisamente vértigo lo que siento, porque me apetece mucho contar lo que ocurre en esta época y trabajar el personaje de Luis. Tengo la intención de retomarlo desde la Historia de España con lo que conlleva, es decir trabajar el imperio en todo su esplendor.