Si algo ha quedado claro en EE.UU. es que el Presidente puede indultar hasta el último minuto. El 20 de enero del 2000, a pocas horas dejar la presidencia, Bill Clinton indultó a ¡140 personas! Y conmutó otras ¡36 penas! Entre los implicados había amigos y un familiar lejano. Por cierto, cada uno de los 50 Gobernadores puede hacer lo propio en su Estado.
Nada más llegar al cargo Trump cumplió una de sus promesas, indultar al sheriff Joe, a quien un juez había metido en la cárcel por permitir palizas y trato vejatorios contra los inmigrantes ilegales detenidos a su cargo. Estos incluían, por iniciativa personal del sheriff vestirlos con pijamas rosas o capuchas con orejas de conejo. Además se les obligaba a pasar horas bajo el asolador sol del desierto con el mínimo de agua y comida. Hay un Salvados en que aparece.
A diferencia de en España, allí el indulto ni siquiera precisa de una mínima motivación.
«El 20 de enero del 2000, a pocas horas dejar la presidencia, Bill Clinton indultó a ¡140 personas!»
¿Existe el indulto preventivo? Sí, Gerald Ford indultó a su predecesor, Nixon, “por todos los delitos que haya cometido o haya podido cometer contra EE.UU.”. En la práctica esto supuso que aunque Nixon había dimitido, no se le podía juzgar –no se puede juzgar al Presidente mientras está en el cargo. ¿Qué sentido tiene juzgar a alguien a quién no puedes condenar?
Con estos antecedentes parece claro que hasta que deje el despacho oval, Trump puede indultar a quien le plazca, familiar o amigo. Además puede usarlo recurriendo a fórmulas generales, sin especificar delitos concretos e imposibilitando enjuiciamientos penales por cualquier hecho anterior al indulto.
Ahora bien, ¿puede el Presidente indultarse a sí mismo? Durante la crisis del Watergate, el equipo de Nixon formuló esta pregunta al equipo jurídico del Departamento de –su ministerio- Justicia. La respuesta fue negativa. Sin embargo, el Tribunal Supremo, que tiene la última palabra interpretando la constitución, nunca llegó a pronunciarse.
«Gerald Ford indultó a su predecesor, Nixon, por todos los delitos que haya cometido o haya podido cometer contra EE.UU.«
Para los juristas que afirman esta posibilidad, la constitución habla del poder de indultar sin fijar condiciones ni límites. Pero esta posición es extraordinariamente minoritaria. Para la amplísima mayoría de juristas es inconcebible que el Presidente se indulte así mismo, ya que supondría el fin del sistema de check and balance, es decir, de control del poder.
Por ponerlo en contexto: imaginad, el Presidente secuestra a unos senadores para ganar una votación. Luego se indulta por ello. Es más, cuando el Congreso decide emprender un impeachment para destituirlo por el secuestro repite la jugada: en la votación final del impeachment secuestra a varios senadores para asegurarse de ganarla y vuelve a indultarse a sí mismo.
Existe una tercera postura, una especie de punto intermedio entre las anteriores, según la cual el Presidente no podría indultarse a sí mismo por ningún delito cometido durante su mandato, pero sí por lo que hubiese hecho antes de acceder al puesto. En otras palabras, Trump podría librarse de los procesos de adquisición fraudulenta de créditos, acoso y agresión sexual y fraude fiscal que le esperan en el Estado de Nueva York, pero no de ser imputado por el asalto al Capitolio, como quiere hacer la fiscalía del país.
«hasta que deje el despacho oval, Trump puede indultar a quien le plazca, familiar o amigo»
A mi entender esta postura podría llegar a ser admisible desde el punto de vista de la separación de poderes, en tanto que el poder judicial seguiría controlando al Presiente por lo que hubiese hecho en el despacho oval, una vez deja el cargo. No así, desde el punto de vista de la jurisprudencia estadounidense en materia de conflicto del interés y la noción del abuso del poder conferido. En resumen, parece muy improbable que el Tribunal Supremo diera por bueno el autoindulto de Trump.
Se rumoreó que igual dimitía unos días antes para que Pence, como Presidente por un día, lo indultara. Pero lo dudo mucho teniendo en cuenta lo que ha dicho de él en los últimos días.